El ex presidente norteamericano Jimmy Carter se ha ofrecido a través de su organización, el Centro Carter, para actuar como observador internacional en un supuesto referéndum de autodeterminación de Cataluña:“Mi organización estaría dispuesta a venir aquí para ayudar a asegurarse de que la voluntad del pueblo catalán se expresa de manera adecuada”.
El ex presidente norteamericano más desprestigiado de las últimas décadas, después de Nixon, ha realizado estas declaraciones en Barcelona, donde, exhibiendo sus proverbiales dotes para la diplomacia, se dispone a recoger los 100.000 euros que el tripartito quiere entregarle.
El formato de la entrega de este dinero, procedente del bolsillo de los ciudadanos, será la entrega del Premio Internacional Cataluña 2010.
Carter se ha lanzado a juzgar la política interior española en cuanto ha tomado tierra en Barcelona. Con respecto a la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el estatuto catalán ha afirmado que “de ninguna manera un tribunal puede modificar de forma dramática la cultura básica, el compromiso, la herencia y el patrimonio del pueblo catalán”:
“El carácter catalán se perpetuará y será admirado durante mil años más con independencia de lo que sentencie el Tribunal Constitucional".
Y luego ha recomendado a los catalanes que tengan paciencia.
De Valencia freedom
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