jueves, 18 de febrero de 2010

92 alumnos se ponen a prueba en la XXI Olimpiada de Física

EDUCACIÓN | En la UIB

Un momento de la prueba. | Jordi Avellà

Un momento de la prueba. | Jordi Avellà

Estas últimas semanas los profesores de Física de los distintos centros donde se cursa bachillerato se han encargado de seleccionar a los mejores de su clase para competir en la Olimpiada de Física que ayer se celebró en la Universitat de les Illes Balears (UIB).

Rogert, Plamen, Maurizio y Felipe –o los cuatro olímpicos, como les conocen ahora sus compañeros– representaron al IES Politècnic, motivados por pasar una jornada diferente fuera de las aulas. Algunos, hasta repiten. Es la tercera vez que Rogert se presenta a una olimpiada de este tipo. Rafael, alumno del IES Medina Mayurqa, ganó los cien euros del tercer premio en 2008.

La XXI Olimpiada de Física se realizó en el edificio Mateu Orfila de la UIB. Simultáneamente, se realizaron las pruebas en las sedes universitarias de Menorca e Ibiza y Formentera. 92 alumnos de primero y segundo de Bachillerato se reunieron en esta convocatoria para poner a prueba sus conocimientos de Física. El resultado decidirá quiénes son los tres mejores alumnos de Baleares en este campo, que participarán en la convocatoria nacional que se celebrará en Alicante en abril.

Pocos alumnos repasaban antes de entrar en el aula ya que se trataba de «demostrar lo que ya sabemos», apuntó Jonatan, alumno de Medina Mayurqa. Con o sin profesor, la mayor parte de los estudiantes optó por prepararse la prueba repasando las de años anteriores. Muchos reconocieron haber estudiado sólo el día anterior, por la carga lectiva que afrontan en esta época, aunque parece que no se llevaron ninguna sorpresa: el nivel exigido fue el esperado.

Plamen, el primero en resolver la prueba, afirmó que ya esperaban que les exigieran «lo máximo», puesto que el objetivo es encontrar a los capaces de ganar la olimpiada nacional. En su caso, tuvo que afrontar algunas preguntas sobre temas que todavía no habían tratado en clase. Algunos salieron después de casi dos horas, contentos. Otros, no coincidían al comparar los resultados. Pero en general, todos iban con la misma idea: pasar un buen rato, hacer algo diferente y conocer el ambiente universitario del que pronto formarán parte.

(El Mundo-eldia de Baleares)

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