INDALECIO RIBELLESPalma
El único partido de la oposición en el Ayuntamiento de Palma de Mallorca, el Grupo municipal Popular (PP), hizo ayer una denuncia de ésas que ponen en solfa las promesas de austeridad y ahorro con las que el equipo de Gobierno liderado por la alcadesa socialista Aina Calvo calificó los presupuestos de la Administración municipal para 2010. El PP denunció el aumento, en plena crisis, de un 73% del gasto destinado a dinamizadores lingüísticos para impulsar las campañas en favor del catalán desde el área de Cultura que lidera la concejala nacionalista (PSM) Nanda Ramón.
«La supuesta austeridad que dijo la alcaldesa que caracterizaba los presupuestos del 2010 no llegará ni a los altos cargos ni tampoco a la política de normalización lingüística que impulsa el Gobierno municipal», denunció el portavoz del PP en el Consistorio palmesano, Julio Martínez.
Para los populares «un derroche injustificado que no responde a ninguna prioridad de los ciudadanos». La partida sobre la que el PP puso el foco de sus críticas pasará de los 120.000 euros destinados el pasado ejercicio a los 207.762 que ya hay reservados para emplear en el presente año. Un dinero que el Gobierno de Calvo empleará para ampliar el contrato que mantiene con la Obra Cultural Balear (OCB) y con Joves de Mallorca per la Llengua desde octubre de 2008, en que empezó a funcionar el servicio municipal de Dinamización Lingüística.
Se da la circunstancia de que al frente de la dirección general de Política Lingüística está Paula Fluxà Garcías, hija de la jefa de Comunicación del Govern balear liderado por el socialista Francesc Antich
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