El derroche planetario

Por Antonio Burgos (ABC)

QUIEN de verdad tenía que haber dado las campanadas en la tele era Leire Pajín. No era el comienzo del 2010. Era nada menos que el inicio de la conjunción planetaria entre Obama en Estados Unidos y ZP en Europa. Que Dios nos coja confesados. La gala humorística de tal estreno planetario ha corrido a cargo del propio ZP. Aguanten la risa: ZP, para inaugurar su conjunción planetaria, anunció que va a sacar a Europa de la crisis económica. ¡Toma castaña de España! No se me descojonen con la risa tonta, por favor. Como si no tuviera aquí suficientes millones de parados y no fuera hondo el agujero del déficit público en que nos ha metido a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros nietos, ahora quiere arreglar Europa. Vamos, que éste es capaz de levantar toda las aceras de Europa para volver a pavimentarlas con su Plan E, que empleo estable no ha creado ninguno, pero que ha puesto los acerados de toda España, hasta del último pueblo, que no vea usted, qué forma de tirar el dinero en inutilidades, Dios mío de mi alma.

¿Habráse visto catetada mayor que iluminar los monumentos de azul (color de las totalitarias camisas de Falange, por cierto) para presumir de la presidencia de turno de una Unión Europea que, además, lo que estrena de verdad es presidencia duradera y efectiva, con ese belga Herman Van Rompuy que no lo conoce ni la madre que lo parió? El definitivo Van Rompuy, que sí que es fijo de plantilla, verá al efímero y semestral ZP como el ordenanza del chiste contemplaba al ministro que tomaba posesión de su cargo: como un interino. Interinidad aleatoria del orden alfabético tan poco importante, que haga usted mismo la encuesta entre sus amistades: ¿quién puñetas sabe qué país europeo ocupaba la anterior presidencia semestral y cuál será el que sucederá a España?

Bueno, pues esta tontería de la conjunción planetaria que le permitirá a ZP sacar pecho como si fuera el cabezamixto de Obama, nos va a costar, según Europa Press, 83 millones de euros. Que son: 55 de los presupuestos generales del Estado, 18 del Ministerio del Interior, y 10 del Ministerio de Asuntos Exteriores. Dividan 83 millones entre 180 días, y el día de presidencia europea nos va a salir a 461.111 euros, o sea 76,6 millones de pesetas por levantar el cierre cada día. ¿Cuántos empleos podrían crearse durante un semestre destinando a inversiones productivas 461.111 euros al día?

Si el 28 de diciembre hubieran dado la relación de tonterías y mamarrachadas en que van a despilfarrar esos 83 millones de euros, la gente hubiera creído que era una inocentada. Van a gastarse 2,99 millones de euros (o sea, 500 millones de pesetas) en ¡alquilar muebles de diseño para las cumbres europeas que han de celebrarse en España! No en dar jornales a las carpinterías y a la tiesa industria levantina del mueble, no: en alquilar chorradas de diseño. Y cita Europa Press una cifra tan increíble que hasta parece errata. No me lo puedo creer, pero dicen que le han pagado a Telefónica 11,9 millones de euros por prestar asistencia técnica y seguridad a la web de la presidencia española. Vamos, para que ZP salga bonito en Internet. ¿Cómo puede costar eso una web, cosa que sabe hacer perfectamente por una propinilla ese sobrino manitas con los ordenadores que tenemos todos? Las cuentas del Gran Capitán eran de una austeridad espartana al lado del disparatón de este derroche. Miren: en azafatas, 2,57 millones de euros; en adecuación de espacios, 883.000 euros; en intérpretes para conferencias, 637.652 euros; en fabricación de las acreditaciones, 397.671 euros; en traducción de los contenidos de la web, 147.900 euros; en el desarrollo del logo-marca de la Presidencia, 54.870 euros; en regalos de corbatas para los hombres y pañuelos para las mujeres que asistan a las cumbres, 100.000 euros. Y todo por ser correturno europeo durante seis meses: «Echa vino, montañés, que lo paga Luis de Vargas». Ya te cogeré en mi calle el día de las elecciones...

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