"La lengua estándar catalana provocará en pocos años más daño a nuestra lengua que la que produjo el castellano en quinientos años. Se quieren laminar todos los signos de nuestra identidad pero ¿interesa realmente ese tema a los políticos? No parece importarles"
Miguel Nigorra Oliver
El presidente y el director general de aquellos entes lo han dicho muy claro: el acento catalán hay que imponerlo para unificar la lengua hablada pues si distinguimos entre el acento de Cataluña y el de Mallorca habría que distinguir entre los acentos de Bunyola y el de Felanitx lo cual representaría un caos total. El argumento es que «todas las radios y televisiones en castellano tienden también a la estandarización y eso no va en contra de ninguna modalidad» y añaden que «ningún presentador hablaría un andaluz cerrado». Ya llegó por fin la monserga del andaluz. El andaluz lo mismo que el canario, el argentino y el mejicano son sólo acentos del castellano pero el vocabulario es esencialmente el mismo. Pero tampoco es verdad lo que dicen los pantacatalanistas, pues estamos artos de oír o escuchar, los que escuchan, los seriales sudamericanos con sus diversos acentos y tampoco pasa nada. Decir que nuestra lengua es un acento del catalán de Cataluña o es ignorancia, que no lo es, o es mala fe.
Ya sabemos que el acento catalán es diferente del balear pero además las modalidades lingüísticas comunes a todas las islas están absolutamente diferenciadas del catalán estándar y fueron siempre respetadas por los más importantes escritores clásicos insulares. Estas modalidades no tienen nada que ver con el acento. Nuestro vocabulario, además del acento, está siendo diariamente machacado por los medios audiovisuales. El artículo salado, la característica más importante y común en todas las islas, que identifica nuestra lengua entre la mayoría de las romances surge en cada frase y precisamente por ello nuestro artículo ha sido designado como el primer objetivo a batir para desterrarlo y olvidarlo.
El paso próximo será la negación de cualquier signo de identidad cultural con lo que quedaran nuestras islas colonizadas para siempre. La lengua estándar catalana provocará en pocos años más daño a nuestra lengua que la que produjo el castellano en quinientos años. Se quieren laminar todos los signos de nuestra identidad pero ¿interesa realmente ese tema a los políticos? No parece importarles. El pantacatalanismo, subvencionado por la Generalitat, está dominando la UIB y al político no le interesa enfrentarse con este lobby academicista que tiene un negocio perfectamente montado basado en el catalán estándar. Los políticos de la oposición también pasan de este tema, y de otros muchos, pues lo único que pretenden es mantenerse con comodidad, sin asumir riesgos e ir sobreviviendo con sus bien remunerados emolumentos. Qui dies passa anys empeny i lo que no mata engreixa.
Con el tema de la lengua quien pierde es nuestra juventud. Esto constituye la gran responsabilidad de los políticos. La juventud pierde la oportunidad de elevar el nivel del castellano y alcanzar un nivel aceptable de inglés. Con el catalán omnipresente en la enseñanza no queda tiempo para las dos lenguas más importantes del mundo. El limitado nivel cultural de un magisterio politizado en exceso hace el resto. No hay dinero para más y el corporativismo se impone en el reparto. En el país de ciegos el tuerto es el rey. Los ciegos, en nuestro país, serán cada vez más pero los tronos de los reyezuelos tuertos estarán ya ocupados.
3 comentarios:
abans de dir estupideses i obrir la boca, estudia un poc més. El català és una llengua, com qualsevol altra al món.
I qui ha dit lo contrari?
I qui es aquest "Nigorra", que, es mès, escriu en castellá, per dir totes aquestes estupideces. Tal volta hauríe d´anar a escolete
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