Si la semana pasada conocíamos los desperfectos que padece el edificio del teatro de Artà a partir de las denuncias realizadas por Guillem Caldentey, portavoz de Els verds-Esquerra de ese municipio, y por el alcalde Rafael Gili (UM), ayer por la mañana fue el turno de los Independents y del arquitecto del edificio, Mateu Carrió, quienes realizaron una rueda de prensa informativa en el mismo teatro para explicar su versión.La portavoz de los Independents, Margalida Tous, se mostró preocupada por la alarma que según ella se ha creado en el pueblo después de las declaraciones del primer edil aludiendo a que el teatro se caía. Según ella, estas manifestaciones "son una auténtica falacia y no se sustentan con ningún informe técnico", algo que, a su entender, supone "una persecución política tanto contra el técnico (Mateu Carrió) como contra nosotros, que lo único que queremos es que el teatro sea el orgullo del pueblo".
Los hechos motivo de disputa se remontan al pasado mes de Mayo, cuando se desplomaron algunas baldosas de la fachada del edificio, lo que llevó al equipo de gobierno a precintar los accesos laterales del teatro; estas deficiencias fueron subsanadas al poco tiempo, según consta en el informe técnico elaborado por el propio Carrió. Más recientemente se han apuntalado dos salas del teatro, situadas en la parte inferior de la terraza de entrada al edificio.
En el análisis de los motivos de este nuevo contratiempo no coinciden los informes técnicos, ya que a petición del consistorio la asesoría ATP realizó un informe en el que la causa podría ser el sobrepeso de la terraza superior. De este informe discrepan tanto el propio Mateu Carrió como el informe técnico elaborado por el perito de su seguro, que atribuyen los daños a la humedad. "Los síntomas son claros y cualquier albañil del pueblo sabe que una grieta longitudinal en la biga de una cubierta es signo de humedad", manifestó Carrió.
Celebraciones navideñas
Tanto para Carrió como para los Independents, la causa de la humedad hay que buscarla en los treinta agujeros de unos dieciséis centímetros de profundidad que se realizaron en la terraza para instalar una carpa en las Navidades de 2004, 2005 y 2006, y que han absorbido durante estos tres años todo el agua caída. "La responsabilidad es de quien ha hecho los agujeros en su casa, el equipo de Gobierno de Gili y en el que también estaba el regidor de EU-Esquerra de Artà", dijo Carrió. Finamente, Independents preguntó por las facturas que faltan para sumar los setecientos millones de las antiguas pesetas que costó el teatro, cuando según su constancia solo son cuatrocientos cincuenta.
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