miércoles, 13 de octubre de 2010

El pudor de Bibiana Aído

Quizá hubiera debido titular “La falta de pudor de Bibiana Aído”. O “La desvergüenza de Bibiana Aído”. Porque de eso me dispongo a hablar.
Me he tenido que enterar de lo que es un “tupper sex” para entender a qué se refería la periodista de La Sexta que sometió a la flamante ministra a una pringosa entrevista lamentón para el casposo programa del Wyoming. A Bibiana le encantan los "tupper sex", a saber, reuniones en donde un fulano o fulana explica el funcionamiento de diversos juguetes de índole sexual. Ya he dicho alguna vez que los políticos progres han hecho todo lo posible por restarle seriedad a un tema tan importante. Y eso contribuye al aumento de las enfermedades venéreas, los embarazos no deseados, los abortos, etc, etc, etc. Justo lo que constantemente presumen de combatir.
Una ministra, sobre todo si alcanza ese privilegio a tan temprana edad, debería convertirse en ejemplo viviente de responsabilidad, moderación y seriedad. Sobre todo cuando gestiona un presupuesto que tiene, entre otros propósitos, mejorar la salud sexual de la población.
Me pregunto cuál es el sentido del pudor que tiene esta señora para, sabiendo que ejerce un alto cargo y que su posición lleva implícita una carga importante de representatividad social, contar sin el más mínimo atisbo de pudor sus infantiles aficiones sexuales a un programa de televisión.
Aquí pueden ver las imágenes. No tienen desperdicio. De hecho, son todas ellas un maloliente desperdicio.
http://www.lasexta.com/sextatv/elintermedio/amigas_de_tupper_sex/174181/121
Para la ministra de Igualdad, todos los crímenes que cometen los hombres sobre las mujeres se deben exclusivamente a su condición de mujeres. O sea, que un maromo que llega borracho, drogado o cabreado a su domicilio, y la emprende a golpes que su santa esposa, aunque ella sea trabajadora y competente, no lo hace por su condición de drogadicto o sea un cretino de baja estofa, sino porque no puede soportar a las mujeres. Semejante forma de razonar, hija de un sectarismo genético, explica el concepto que ha conformado en su limitada inteligencia sobre salud sexual. Lo suyo es ir de guay. Y mientras, mueren más mujeres a manos de sus maromos y más niños no nacidos a manos de las lamentables políticas de la impúdica Bibiana.

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